Dia 13. Jornada de reflexión por la tarde.

 Hay nubarrones y amenaza lluvia. Acabo de comer y pienso que la luz es buena para hacer fotografías. Así que cojo el coche y me dirijo al centro de Blanes. Me sorprende no ver gente por el paseo ni en la playa. La poca gente que pude ver estaban sentados en los restaurantes acabando de comer. Por un momento pensé que estaba en medio de una película de Stephen King. En ese momento el sol intuyó que me estaba preparando el móvil para hacer fotos y empezó a jugar. Que si ahora salgo, que si ahora me escondo... Y poco a poco fui cocinando mi propio reportaje. Una de las que me quedó mejor fue esta. Pero ya habréis observado que no sale así del móvil. La pasé un poco por Photoshop y le puse un filtro. Espero que os guste!







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Comentaris

Antonio Rodriguez ha dit…
Una bonita imagen para reflexionar en la jornada de reflexión y decidir qué hacer, sino se tiene decidido ya, el dia de la votación.
Un abrazo y cuidate.
Fernando Álvarez ha dit…
Un sito que invita a la reflexión, y no solo del que te refieres...
Un abrazo Jordi
lunaroja ha dit…
Muy buena introducción para esta foto inquietante y bella.
Tienes buen ojo para captar instantes.
Un abrazo.
sa lluna ha dit…
Doncs has triat molt bé! Ja de per sí, en aquest temps, hi ha poca gent per les platges i és el moment per a fotografiar aquests jocs de la natura tan sorprenents. Enhorabona!

Aferradetes, Jordi.
VENTANA DE FOTO ha dit…
Mientras paseas y tomas fotografías, has tenido tiempo para reflexionar.

Ahora los lugares no son los mismos que antes, las calles están solitarias por el miedo que hay de contraer la enfermedad.

Besos
Laura ha dit…
Día de reflexión en la playa.
Yo últimamente reflexiono mucho, parece.
Besos.
Ildefonso Robledo ha dit…
Pues sí, amigo, te quedó genial, con ese cielo precioso
Un abrazo
Carmela ha dit…
Pues reflexionaste muy requetebien, te quedó preciosa.
Un besazo.
Recomenzar ha dit…
Es arte lo que sacas con tus ojos cuando abrazas tu cámara.La relación íntima que tienes con ella es maravillosa beso
Jesús Castellano ha dit…
Un lugar idóneo para reflexionar o simplemente para relajarse y disfrutar de ese bello paisaje. La foto te quedo muy bonita, Jordi.

Saludos.
Tesa Medina ha dit…
Preciosa y drámatica toma, Jordi, con esos cielos espectaculares. A mí me encanta la playa y el mar en invierno.

Espero que después de esta jornada de reflexión y ya con los resultados empiece una nueva etapa para mi amada Cataluña con menos crispación.

Un abrazo,

alfonso ha dit…
·.
El trabajo te ha quedado perfecto, redondo. Le has dado el grado de saturación preciso, sin pasarte, para conseguir el efecto dramático.

Un abrazo Jordi

LaMiradaAusente · & · CristalRasgado
Esmeralda ha dit…
La foto extraordinaria ... una edició magnífica

Abraçades
El tejón ha dit…
Que texturas más bellas, Jordi.
Un abrazo.
Mi nombre es Mucha ha dit…
me gusta tu foto se parece a vos
calmo y tranquilo
y a veces con tormentas de tu corazon abrazossssssssssssss
A very nice image ...

All the best Jan
Ana Manotas Cascos ha dit…
Una bonita y relajante imagen. Un saludo.
Jordi
Foto perfecta
Me gusta el mar y se ve fantástico.
Beso

;)
Marty ha dit…
I would love to be there. So nice so beautiful
María ha dit…
Esta foto me la había pasado, me encanta el mar.

Besos.
Jennifer Davison ha dit…
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Último libro leído

Último libro leído
La novela que nos cuenta la dura realidad de las mujeres españolas obligadas a prostituirse en los campos de concentración. Yo, Isidora Ramírez García, que perdí mi nombre cuando abandoné España junto a mi madre, Carmen, y a mi tía Teresa en 1939 en busca de mi hermano Ignacio, voy a contarte mi historia, María. Para que sepas quién soy y quién era tu abuela, y todo aquello que reunió a nuestras familias durante la Guerra Civil para separarlas después. Sabrás de sus pérdidas, que fueron las mías, del dolor inhumano y las lágrimas constantes… Y lo que pasó cuando nuestros destinos se separaron y yo me convertí en una de las prostitutas del campo de concentración de Ravensbrück, un lugar lleno de puentes y palomas blancas, cuyas plumas se ensuciaron de sangre y semen por dos razones: la simple y llana supervivencia y la lucha incesante, con armas escasas, contra el fascismo.