Racó de Sa Palomera VIII







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Comentaris

María ha dit…
Esta imagen es una maravilla... no conozco Blanes... pero en tu mirada nos lo has hecho sentir mágico...

Besos.
josep ha dit…
Llum i color impresionants!
Quina meravella.
Una forta abraçada Jordi
joaquín ha dit…
Una maravilla de foto.Me encantan ese cielo y ese oleaje congelado
Anaximandro ha dit…
Sin duda, un lugar precioso, que se vuelve mágico desde tu mirada.
Un abrazo, Jordi.
Kaya ha dit…
This photograph is amazing! It looks like a beautiful painting on canvas.
A hug.
Fernando Álvarez ha dit…
Ese rincón te da muchas alegrías y de paso también a nosotros. Magnífica composición y encuadre con un cielo más que espectacular.
Un abrazo Jordi
Ana Manotas Cascos ha dit…
Una maravilla de fotos, yo estuve hace mucho tiempo por allí y me pareció un sitio precioso. Un saludo.
El tejón ha dit…
Bella estampa y muy buenos recuerdos que me traes.
Saludos.
Miguel García ha dit…
A la vista de ese cielo es imposible no sentir lástima por esas bonitas barcas del primer plano a las que todavía acaricia el sol.
Un abrazo,
Laura ha dit…
Molt bonica Jordi.
Una abraçada.
Maria Rodrigues ha dit…
Belissima fotografia!!!
Um abraço
Maria
Antonio Rodriguuez ha dit…
Una preciosa fotografía marina.
Un abrazo.
Carmela ha dit…
Preciosa!!
Un beso, Jordi.
Muito Bela meu amigo Jordi
beijinhos
:)
Super photograph.
Love how the light works and of course the boats just add to the lovely scene.

All the best Jan
VENTANA DE FOTO ha dit…
Maravillosos colores en una buena escena marina.

Besos
Unknown ha dit…
Molt bona fotografia, amb un magnífic joc amb els colors. Sa Palomera representa molt per a la gent blanenca. El mateix lloc, diferents sensacions. 👏👏👏

Donde el tiempo se detiene

Donde el tiempo se detiene
Salió de casa, pero todo lo que quería era encontrar un lugar tranquilo. Sus pasos la llevaron hasta un banco apartado, casi escondido. Parecía el lugar perfecto. Se sentó con cuidado, y abrió el libro que llevaba bajo el brazo. Allí, entre las páginas y el sonido cercano del mar, encontró el respiro que andaba buscando. Llevaba mucho rato ahí, sola, dejando que el murmullo de las olas y la brisa del mar fueran su compañía. Su cabello largo se movía suavemente con el viento, pero a ella no parecía importarle. Estaba totalmente perdida en la historia que leía, como si fuera su refugio, un escape hacia un sitio donde solo sus pensamientos y el libro pudieran entrar. De vez en cuando levantaba la vista, mirando el horizonte. Quizá porque las palabras del libro la hacían imaginarse mundos lejanos o porque, simplemente, el azul del mar la invitaba a soñar. Pero siempre volvía al libro, como si en esas páginas estuviera buscando algo que el mundo real no podía darle. Era un momento simple, pero perfecto. Un instante en el que el tiempo no importaba, en el que todo lo que necesitaba estaba justo ahí. “Un lugar donde el tiempo se detiene”